“No podemos incrementar la nómina de la compañía debido a la crisis, pero tenemos que pensar de forma creativa e innovadora y nos damos cuenta que muchos de los desafíos que tenemos por delante requieren de un talento que hoy no tenemos en la empresa”. Estas fueron las palabras de un director de Recursos Humanos que confesó su frustración por las desventajas de la empresa respecto al talento futuro. ¿Cómo están haciendo las compañías en el mundo y en Argentina para lograr saltar las barreras de la inercia de la propia organización?
Se estima que para 2030 más del 60% de los trabajadores mundiales serán freelancer, de acuerdo a un artículo de Harvard Business Review publicado este año. El trabajo freelance comienza a normalizarse como una opción viable para muchas personas para ser más dueños de su tiempo y, para otras, como una opción de ingreso adicional a trabajos en relación de dependencia. En una reciente encuesta en Estados Unidos a empresas, el 90% de los consultados consideró que esas plataformas serán centrales para poder competir en el futuro.
Para conseguir proyectos en formato freelancer, han aparecido en los últimos años diversas plataformas que compiten por el talento y por los proyectos a través de diferentes propuestas de valor. LinkedIn recientemente anunció que incorporaría funcionalidades para facilitar la contratación de profesionales en este formato dentro de su propia plataforma. El talento y las empresas tienen cada vez más opciones, y lo que parecía el futuro del trabajo empieza a convertirse en el presente.
Si bien el Covid trajo caos, también aceleró procesos que venían gestándose hacía años de forma lenta y orgánica, entre los cuales hubo muchos relacionados con la forma en que trabajamos. La remotización de la oficina, el uso de herramientas para articular el trabajo descentralizado y asincrónico y, la digitalización de procesos, favoreció a que muchas empresas comenzaran a mostrarse más abiertas a la incorporación de talento on demand para atender necesidades específicas.
A nivel internacional plataformas como Catalant, InnoCentive, Kaggle, Toptal y Upwork crecieron exponencialmente durante la pandemia. Pero no son todas iguales. En la economía gig han aparecido diversas plataformas para canalizar diferentes necesidades: plataformas para llegar al talento “premium” como expertos en mercados de nicho, súper especialistas en ciencias de datos o ejecutivos estratégicos e inclusive managers interinos. Un segundo tipo de plataformas es la que se dedica a trabajadores freelancers para trabajos puntuales y mayormente técnicos. Finalmente, otro tipo de plataformas se focalizaron en resolver problemas innovadores a partir de una plataforma de crowdsourcing. InnoCentive es líder y pionera en este rubro donde las empresas postean problemas y usuarios con conocimientos específicos intentan resolverlos.
¿Por qué son relevantes estas plataformas? Porque responden a las preguntas que las empresas se están haciendo con miras al futuro: ¿Cómo accedemos a los talentos difíciles de encontrar? ¿Cuáles son las posiciones y roles que han cambiado? ¿Cuáles son las nuevas capacidades requeridas? ¿Cuáles son los trabajos que los empleados freelance pueden realizar mejor y más eficientemente?.
Las plataformas de talento freelance han evolucionado de simples a complejas; de sólo matchear candidatos con posiciones abiertas a generar valor adicional para los empleadores y buscadores de trabajo. Hoy en día, muchas incluyen soporte para la empresa como para el freelancer: selección y filtro de candidatos, comunidades de networking, cursos, herramientas de trabajo colaborativas, seguros y medios de pago.
¿Qué podemos encontrar en la Argentina? Dos plataformas en el país llaman la atención.
Seeds/ Sembramos Talento, es una plataforma que nació en 2019 y sus fundadores son jóvenes ingenieros del ITBA. Su propuesta es clara: tener a los mejores freelancers de América Latina para que desarrollen proyectos en multinacionales y empresas del exterior. El foco de Seeds es amplio abarcando temas más técnicos relacionados con la programación, producto y diseño, pero también metiéndose en el negocio a través de la consultoría estratégica, operaciones y recursos humanos. Según Ian Teperman (fundador y Head of Product), se aseguran de conseguir al mejor talento con procesos de validación de ingreso estrictos, casi tanto como el que recorren los candidatos que ingresan como empleados a empresas multinacionales. De quienes se postulan para ser seeders, solamente ingresa entre un 15 y 20%. “Validamos a la gente a través de testeos de cultura, aptitudes, entrevistas y requisitos mínimos de experiencia” – comenta. Buscan que los freelancers recuperen las ventajas que tiene ser un empleado tradicional (compañeros de trabajo, beneficios adicionales, coworking, etc.), pero pudiendo elegir cuándo y cómo trabajar.
Workana, es líder en el mercado local. Es una plataforma de trabajo remoto, online y freelance. Uno de sus fundadores, Guillermo Bracciaforte, asevera que “el mundo del trabajo está cambiando y somos parte de esa transformación. Lo vimos en la pandemia y en la pospandemia queda claro que gran parte del talento no va a aceptar las condiciones que tenían antes de la misma. Nosotros acompañamos ese cambio y lo impulsamos”. Workana es hoy líder en Latinoamérica y en España y la unidad en el Sudeste Asiático es la que más rápido crece. “Recibimos más de 70.000 nuevos registros de freelancers cada mes, pero solo el 4% es aceptado para formar parte de la plataforma. Buscamos tener el mejor talento independiente” asegura Bracciaforte.
La empresa cuenta solamente en la Argentina con 355.000 freelancers. La base del país creció más de 45% desde que empezó la pandemia. La demanda por el lado de las empresas creció más fuerte para tareas asociadas desarrollo web y aplicaciones, diseño y UX y marketing digital. También crecieron las búsquedas de asistencia administrativa o de soporte al cliente.
La aceleración de los cambios que trajo la pandemia, está dejando a todos perplejos y atentos a lo que vendrá. Tal vez estemos siendo testigos del final del trabajo de 9 a 18 horas en la oficina para pasar a trabajar de una manera ágil y flexible, con talento independiente tomando el control sobre su tiempo y eligiendo en qué y cuándo trabajar. Las plataformas están ayudando a que el sueño de muchos de trabajar en forma independiente, sea una realidad.