México - La pasada semana de la moda en Rusia presentó una propuesta distinta, en donde resaltaron temas de moda sostenible y el papel de la tecnología en la industria, incluyendo iniciativas de inteligencia artificial y plataformas digitales como redes sociales. Además, Mercedes-Benz Fashion Week Russia le abrió la puerta a diseñadores de otras partes del mundo, quienes mostraron sus colecciones en presentaciones en video.
Los países invitados fueron Argentina, Bélgica, Gran Bretaña, Alemania, India, España, Israel, Chipre, Nigeria, Holanda, Perú, Polonia, Estados Unidos, Francia, Chile, Corea del Sur, Japón y México. Para la participación de México, Mexico Fashion Week extendió la invitación a Collectiva Concepción, Vero Díaz y Alejandra Raw.
En FashionUnited conversamos con la originaria de Yucatán, Vero Díaz, quien presentó su colección otoño-invierno 2021, de nombre Nativa, durante esta semana rusa de la moda, llevando un poco de sus raíces y de la esencia mexicana contemporánea al público ruso. A continuación, nuestra conversación sobre esta experiencia.
¿Cómo fue tu experiencia de representar la moda mexicana en la semana de la moda de Rusia?
Cuando me habló Beatriz Calles para invitarme a participar y presentar mi colección en Fashion Week Rusia no lo podía creer. Pero había que preparar todo con muy poco tiempo. Me llamó a mediados de marzo y tenía que entregar todo el material el 5 de abril. Tenía como 20 días para hacer la colección completa: inspiración, producción, video. Era un reto muy grande, pero lo tomé sin pensar porque era una gran oportunidad, una que no se presenta todos los días.
Aún así, no fue algo que sintiera pesado, porque siento que fluyó muy bien. La colección representa mucho mi estilo y lo que quería transmitir de la moda mexicana a Rusia. Sobre todo, muestra un Vero Díaz un poco más moderno y vanguardista. “Wearable” pero sin perder nuestra esencia.
¿Qué concepto querías reflejar?
Yo lo que quería reflejar era mi ADN como marca. Al final eso es lo que cada diseñador debe tener escrito en la piel y en cada uno de los diseños. Primero era cuidar esto, y al mismo tiempo mostrar una moda mexicana que tiene raíces. Yo soy de Yucatán y aquí hay mucha artesanía y piezas hechas a mano, entonces mi marca se representa mucho por tener el tema artesanal predominante en las piezas, como bordados o tejidos. Pero al mismo tiempo quiero traer la marca a la actualidad para que sea vanguardista y competitiva a nivel internacional.
Yo quería que las prendas representaran a México, a mi ADN y a mis raíces, pero que también fuera moda de carácter internacional. Al final, la colección se llama Nativa, está inspirada en estas raíces, y fue una combinación de todo esto. Quería una línea competitiva y que cualquiera pudiera usar.
¿Qué fue lo más difícil del proceso?
Yo creo que todos los diseñadores, cuando estamos en la parte de producción de nuestras colecciones, siempre nos topamos con pared. A mí me pasa al principio, cuando empiezo a hacer las primeras piezas siempre son las más difíciles y en las que más me tardo. Y me pasó. Tenía que hacer la colección de 23 salidas en ocho días. Estábamos en el día cuatro y solo tenía dos prendas listas. Pensé que no íbamos a acabar y que iba a quedar una colección de 10 piezas. Pero ya teníamos a cuatro modelos, todo el equipo de producción y el concepto y necesitábamos mínimo 20 piezas.
Lo bueno es que tengo un muy buen equipo de trabajo y tenía la capacidad de producir varias prendas al día, pero al principio aterrizar las piezas para que queden como quieres es muy difícil. Sobre todo cuidando los detalles porque para mí esto es muy importante. Pero de un día para otro todo empezó a fluir y lo logramos.
¿Cómo pensaste en conectar con el mercado ruso?
Yo quería mostrar mis raíces y mi esencia, y obviamente es muy diferente al estilo en Rusia. Empezando con el frío. Es otro tipo de clima, vida y estilo. Sí me costó un poco lidiar con eso porque al principio pensaba que debía hacer prendas que ellos pudieran usar. Pero al final decidimos mejor terminar la colección con lo que sabemos hacer bien y que representa a la marca. Y siento que fue lo mejor, porque lo que nosotros queríamos era mostrar nuestro estilo, nuestra moda mexicana en otros países.
Y hubo muy buenos comentarios sobre la colección. Más de lo que ha habido en otras colecciones. Hemos tenido entrevistas con medios en Rusia y los resultados en redes sociales fueron muy buenos. Como todo fue a nivel digital, puedes ver el resultado de cómo la gente interactúa con tu colección y fue muy positivo.
Ya que viste proyectado el video de la colección, ¿qué pensaste?
Me fascinó. Ha sido el video que más me ha gustado de todo lo que he hecho. La música, el concepto, cómo se movía la cámara, las escenas. Lo sentí muy internacional. Me sorprendió que fue más de lo que pude haber visualizado. ¡Y lo que más me gustó es que lo logramos en 15 días!
De las prendas: me pondría todas. Siento que son muy “wearable”, pero con propuesta de diseño y personalidad. Una de mis favoritas es un pantalón en color camel con aberturas al frente, pero que se agarra de los tobillos.
¿Cómo se ha transformado Vero Díaz durante esta pandemia?
Lo más importante es que esta pandemia me hizo descubrir algo de mí que no sabía que tenía, que es un don para hacer vestidos de novia. Descubrí mi otro yo. Ya había hecho una colección de novias para el Bridal Fashion, pero la dejamos estancada porque la sacamos en junio, antes de la pandemia. Esta colección, para no dejarla perder decidí ponerla con un descuento especial para que saliera. Y empezaron a lloverme las novias. Ellas no podían viajar para buscar un vestido, pero seguían habiendo bodas o por lo menos entregando anillos y de las pocas cosas que podían hacer era elegir su vestido de novia porque no sabían cómo se iban a casar.
Descubrí un mercado enorme que me salvó en la pandemia. Y de hecho fue mucho más que eso. Descubrí que me fascina hacer vestidos de novia y poder ver a la novia feliz y llorando. Es una emoción muy grande porque no podría creer que estaban eligiendo un vestido mio para el día más importante de su vida. Es una sensación muy satisfactoria.
Entonces ahora vamos a conservar las tres líneas. La marca va a tener su colección ready to wear, vestidos de novia y vestidos de noche.
¿Qué es lo que más extrañas de las presentaciones en persona?
La adrenalina del día del show. Ese “rush” y esos nervios del backstage son una sensación muy extrema y divertida. Y no se pierde con los años. Aunque adquieres más seguridad con la experiencia, la adrenalina es totalmente diferente porque lo que transmite cada show en la pasarela es totalmente distinto. Por ejemplo, cuando hicimos la colección de Ixchel llevé a un grupo de mayas a tocar, pero luego me arrepentí porque llegaron pintados cuando les pedí que no lo hicieran y básicamente hicieron lo que quisieron en el show. Yo estaba muy estresada en el backstage. Pero cuando hicimos Summer of ‘69 fue una experiencia totalmente diferente. La colección estaba inspirada en los años setentas y era muy divertida y alegre. Todo fue muy relajado y hasta de repente llovían chispitas del techo. Esa vez incluso estaba bailando en el backstage.